Después de un viernes lluvioso, la ciudad amaneció con un tibio sol de invierno, sin viento y con un cielo celeste que invitaba a una tarde magnífica de rugby.
Desde temprano ya había movimiento en Virrey del Pino con sus canchas de tenis ocupadas y con un verde cesped en la cancha que presagiaba e ilusionaba con ver a un Belgrano avasallante e imponente.
Mientras se vestía la cancha con sus carteles y banderines, poco a poco se poblaba el Club y comenzaba a respirarse un aire muy particular, y no era para menos, después de muchos años el Marrón se mantenía en la punta del Campeonato con un equipo sólido y confiable.
La previa no podía ser más auspiciosa, ya que la Preintermedia y la Intermedia resolvieron sus partidos con autoridad, goleadas mediante.
Se acercaban las 15.30 hs y el Club ya vivía una ebullición que hace mucho no notaba, la confianza era absoluta. Por el otro lado estaba Manuel Belgrano que venía golpeado por una dura derrota frente a La Plata, pero con el convencimiento que éste era el partido para revertir su racha negativa. Para los Maristas, el incentivo era jugar en Virrey del Pino contra el puntero con la firme ilusión de cortarle el invicto y de esa manera seguir pretendiendo instalar en su imaginario colectivo que el encuentro contra el Marrón debía convertirse en un clasico barrial, craso error de los Maristas, lejos está ello que eso ocurra dado que los enfrentamientos entre ambos clubes apenas tienen sus antecedentes a partir de 1983.
Ya con los equipos en la cancha y al ritmo de las Vuvuzelas del Marrón arrancó el partido con Belgrano atacando hacia el ingoal del Balcón. En los primeros minutos no hubo grandes diferencias, sin embargo el BAC lucía más sólido y se insinuaba más peligroso que la visita. Belgrano presionaba con sus forwards y su scrum, logrando adelantarse en el marcador con dos penales de Tincho Lopez Isnardi a los 8 y a los 16 minutos de juego (6 - 0). Tomás Cubelli conducía a los gordos cerrando el juego y dándole ritmo al partido, y es así como a los 23 minutos luego de dominar los forwards a su rival debajo del balcón, se desprendió Tomy pegado a la formación y con el empuje posterior de los gordos, el Oso Galli terminó apoyando en el ingoal su try Nº 101. Con la conversión de Tincho el resultado quedó 13 a 0 y con la sensación de partido controlado, ya que la visita no mostraba argumentos ni juego para inquietar al Marrón. Sin embargo los Maristas se sintieron tocados en su amor propio e intentaron jugar la pelota a las puntas y poco a poco se acercaron al ingoal del BAC. Ese esfuerzo tuvo su premio a los 32 minutos cuando por intermedio de sus forwards lograron descontar con un try debajo de los palos y colocar el 13 - 7 parcial.
A pesar de la escasa diferencia en el marcador, se sentía en el ambiente que el partido estaba controlado y que sólo era cuestión de que Belgrano acertara un par de jugadas para liquidar el partido. Los últimos minutos del primer tiempo transcurrieron sin emociones y se fueron ambos equipos al vesturio con un 13 a 7 favorable al BAC.
Faltaban 40 minutos y se esperaba que Belgrano terminara de explotar y de desarrollar su juego y volcar definitivamente el partido a su favor, y no hizo falta esperar mucho tiempo para que los diferencias comenzaran a marcarse. Apenas habían transcurrido dos minutos de juego y el Marrón dispuso de un scrum a 5 yardas debajo de los palos, el empuje de los gordos fue demoledor y tras la grosera infracción del octavo de la visita (Federico Menini), el referee marcó el primer try penal de la tarde y sacó la tarjeta amarilla para el jugador de Manuel Belgrano. Tincho no tuvo inconvenientes en meter la conversión y el partido quedó 20 a 7. Allí se terminó el encuentro para los Maristas, ya que el BAC bien conducido por su pareja de medios (entre ambos no suman ni 15 partidos en Primera) aprovechó el hombre de más y siguió presionando hasta que a los 9 minutos tiró la pelota hacia afuera y la velocidad de Quiquín Luchetti perforó la defensa rival para marcar su primer try de la tarde (25 - 7).
Con un Belgrano firme y confiado se empezó a liberar la pelota hacia las puntas con un criterioso manejo de los tiempos por parte de Francisco Dulce, quien tuvo la dificil tarea de reemplazar al Negro Rosati, y realmente lo hizo muy bien. Mientras tanto Manuel Belgrano recuperó a Menini pero inmediatamente luego de su ingreso el BAC dispuso de un nuevo scrum en 5 yardas y otra vez el empuje demoledor del pack local provocó el segundo try penal de la tarde y una nueva amarilla para los Maristas (32 - 7) y punto bonus conseguido.
A pesar de contar con un jugador de más, la visita se las arregló para conseguir una pelota en las 25 yardas de Belgrano y jugando rápidamente para afuera logró marcar su segundo try de la tarde (32 - 14) y el BAC sin bonus. El Marrón sintió el golpe y salió a definir el partido y a buscar un nuevo try, el cual llegó a los 22 minutos nuevamente a través de la velocidad de Quiquín Luchetti quien de esa manera apoyó su segundo try de la tarde, la conversión de Tincho estiró el marcador a 39 a 14.
Belgrano seguía dominando el juego y no había posibilidad alguna de que el partido modificara su cauce, sin embargo las inconductas nos volvieron a jugar una mala pasada y Demian Panizzo vio la tarjeta amarilla a los 27 minutos, lo cual envalentonó a los Maristas para intentar llevarse por delante al puntero. La visita recuperó vigor en el scrum e hizo sentir la falta del segunda linea de Belgrano (120 Kg) e inmediatamente tras un scrum a su favor logró marcar un try penal (tercero del partido) colocando la chapa 39 a 21 y al BAC sin punto bonus.
Faltaban 10 minutos para el final, y si bien el Marrón tenía el partido definido, con un jugador menos se le hacía complicado llegar al try necesario para lograr el bonus.
Hasta el regreso de Panizzo los Maristas presionaron pero no tuvieron éxito, ya nuevamente Belgrano con 15 jugadores tomo las riendas del partido y del juego. Tomás Cubelli conducía a los gordos en los últimos minutos intentando perforar la defensa rival, pero los Maristas se defendían bien y no había manera de vulnerarlos hasta que en la última jugada del partido luego de presionar con los forwards, Tomy tiró la pelota hacia afuera y Francisco Dulce rápidamente jugó hacia la punta izquierda hasta que nuevamente Quiquín recibió la pelota quedando mano a mano con su marcador, tomó su marca y entregó un pase hacia adentro habilitando al Gancho Falcón (el otro wing) para que éste no tuviera inconvenientes en marcar el sexto try del Marrón que le daba el ansiado punto bonus y la solitaria punta del Top 14. Tincho convirtió la conquista y no hubo tiempo para más, el 46 a 21 estaba sellado.
Ya con el partido terminado se le hizo una calle al Oso Galli debajo del balcón en donde lo esperó nuestro Presidente Piti Rosati quien le entregó un cuadro en reconocimiento a sus 100 tries en Primera bajo el cerrado aplauso y gritos de los jugadores, socios y simpatizantes del BAC.
La tarde se fue apagando al igual que las Vuvuzelas mientras la Preintermedia B jugaba su partido y se conocían los otros resultados que catapultaban al Marrón a la solitaria punta del Campeonato con 23 unidades.
Ahora nos espera La Plata quien deberá visitarnos el próximo sábado, partido dificil si lo hay para Belgrano, pero esa es otra historia que habrá que analizar en la semana, ahora hay que festejar y disfrutar el presente del BAC y la punta del torneo que bien merecida tenemos.
Finalmente mi pronóstico se cumplió y hubo lluvia en la tarde del sabado en Virrey del Pino, pero la lluvia fue de tries del Marrón.
Ilustra este post el cuadro recibido por el Oso Galli.
Clikeando aquí todos los resultados y la tabla de posiciones. Hindú goleo a lomas por 53 a 3 y consiguió punto bonus.
Por Fernando Vilar Rousseaux
1 comentario:
jaja es verdad, por suerte se cumplio su pronostio de la Lluvia de tries!que suerte de la buena victoria y que el empate del sic posiblita esta punta solitaria, para seguir ilusionandose!
Gabriel de Martinez.
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