| Luego del histórico triunfo en Don Torcuato, Matías Masera cree que para poder seguir por esta senda, el Marrón necesita olvidarse del partido que le ganaron a Hindú y pensar solamente en el próximo rival que se les viene: Newman. |
Terminó el partido y se da la clásica ronda entre jugadores y cuerpo técnico. Finalizada, Matías Masera y compañía saltan con la hinchada a festejar un triunfo que lo mantiene a Belgrano en zona de clasificación y muy bien posicionado para lo que se viene. -¿Sabés hace cuánto no ganaban acá? -Ni idea. -En el 94 fue la última vez… -Tenía tres años je. -El segundo tiempo, ¿fue uno de los mejores de la temporada? -Sí, por ahí por la circunstancia: veníamos 10-0 abajo y no teníamos más fichas. Tenemos a Alumni y al SIC ahí comiéndonos de abajo. El equipo salió a demostrar, no con mucho juego, pero dijimos ’aunque nos falte juego, vamos a jugar con el corazón. Y lo hicimos los cuarenta minutos: nos pasamos esos últimos quince defendiendo, no bajamos los brazos y me quedo con eso.  -La cabeza y poner los pies sobre la Tierra. Cuando nos creemos un poco mejor que alguien, perdemos contra cualquiera. Y cuando priorizamos las cosas que tenemos que priorizar, cuando nos ponemos en serio, entramos a la cancha a hacer lo que tenemos que hacer también le podemos ganar a cualquiera. Somos un equipo peligroso: podemos ser el mejor o el peor. Simplemente tomamos conciencia de eso, el equipo es el mismo que arrancó jugando, el que arrancó perdiendo las primeras 3 fechas. También es ir construyendo: fin de semana a fin de semana y ahora queda lo más lindo. -¿Fue injusta la diferencia del primer tiempo? -Había mucho viento, ellos tienen un 10 (Tito Díaz Bonilla) que juega muy bien con el pie, lo leyó. Nosotros tratamos de salir a jugar el mismo juego en el segundo tiempo: usar el viento, acorralarlos en sus 22, que se les complique salir, no dejarlos entrar en zona de marcación y creo que nos salió. Logramos lo que nos propusimos y por eso fue el segundo tiempo que hicimos. -Me decías que pueden ser el mejor o el peor, ¿qué tienen que consolidar para llegar a la clasificación? -Creo que lo más difícil va a ser olvidarnos de este partido. Si nos quedamos toda la semana con este partido, con Newman nos va a ir mal. Tenemos que disfrutarlo hasta hoy (sábado) a la noche y ya mañana empezar a recuperarnos y empezar a ponernos a punto para pensar en Newman, y después se viene el CASI. Sabíamos que nos quedaban tres finales y dijimos no miremos al otro sábado, sólo lo que tenemos adelante y vayamos a fondo con ellos. Después si viene la clasificación se verá: estamos dejando la vida por eso y sino sabemos que dejamos todo en la cancha.  -La entrega. Te puedo decir el scrum, el line pero la entrega de los quince. Sabíamos que no nos iban a ganar. Nos mirábamos y sabíamos que no iba a pasar. Después de cada tackle, después de cada ruck nos contagiábamos: veíamos al más chiquito nuestro tacklear al más grande de ellos, y te contagiás. Fue un contagio de los quince que terminó como terminó. -¿Fue importante la charla de Agustín (López Isnardi) en el entretiempo? -Sí, de poner los pies sobre la Tierra. No irnos de mambo, porque si es sólo corazón por ahí no servía. Era calmarnos: corazón caliente y cabeza fría. La idea era acorralarlos a ellos: que se sientan incómodos. -¿Cómo le pueden ganar a Newman? -Igual: a Newman le gusta cuando juega cómodo. Cuando le rompés su esquema de juego, salís a marcarlos adelante y los encerrás, no empiezan a ganar la línea de ventaja. Ellos tienen un juego desplegado: si los podemos bajar con el tackle como contra Hindú, va a venir por ahí el partido. Por Francisco Arcuri Fotos: A Pleno Rugby Para www.aplenorugby.com.ar |
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