Queridos Socios,
Si bien ya hemos comenzado las temporadas de Rugby, Hockey, Tenis y Squash, participando en los diferentes torneos de nuestras Asociaciones, el Club vive en sus casi 118 años de vida, un hecho histórico en estos días, al que entiendo debemos prestarle una especial atención y sentirnos orgullosamente partes de esta distinción recibida por un Socio de nuestro Club.
Por primera vez, un jugador del Belgrano Athletic Club, lucirá las “medias “con los colores “marrón y oro”, jugando para los BARBARIANS, que enfrentarán al seleccionado de Inglaterra, nada menos que en Twickenham, el próximo domingo 1 de junio.
Este logro, obtenido por nuestro querido Tomas “Cubo” Cubelli, nos debe generar una ADMIRACION única y un sentimiento por tomar ese espejo y esforzarnos cada vez mas, en el deporte que nos toque, en la tarea que se nos asigne, para lograr que Belgrano Athletic, esté tan alto, como lo está poniendo nuestro Medio Scrum y ahora además, Capitán de Los Pumas, en la ventana de Junio.
A lo extraordinario de esta designación, tendríamos que agregarle el “compromiso” de Tommy, por el Club, por los jugadores del Club y por los valores fundamentales que queremos promover y esto viene a mi reflexión, porque es normal ver a Tommy, ayudando en entrenamientos de juveniles, arbitrando infantiles en Pinazo y hace poco, participando en los “talleres de Valores” con los jugadores de la M16. Estas acciones de “brindarse por los demás”, sin dudas le han aportado una “fortaleza” superior a su “alma”, que permite que se distinga entre los mejores.
Cuando aterrizamos en Londres en el año 1.973 y vimos por TV (blanco y negro) el partido entre los Barbarians y los All Blacks, creo que cada uno de los participantes en esa gira, tomamos conciencia de lo lejos que estábamos de ese RUGBY, una quimera inalcanzable…hoy Tommy, lo hizo posible y esto es un regalo increíble para la HISTORIA del Club.
Gracias Tommy! Suerte, vamos a estar todos empujándote desde aquí.
Los saludo con gran afecto, nos vemos en el Club, nuestra segunda casa.
Alejandro Voltan
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